Cómo lograr que tu pareja no sea el centro de tu vida

Y así, de golpe y porrazo, se acabaron todos nuestros líos sobre el amor romántico, ese ‘quien bien te quiere te hará llorar’ y que ‘los que se pelean se desean’ es lo mejor que te puede pasar. Afortunadamente, los tiempos cambian, la vida evoluciona y esto se acabó definitivamente. Una pareja no debe ser el centro de tu vida, y si lo es, los problemas tarde o temprano llegarán. Porque la media naranja no existe. Sí, definitivamente hemos estado engañadas pensando que la soledad era mala, que necesitábamos alguien que nos completara, que hiciera jugo con nuestra vida, porque de otro modo, no valía la pena. Pues bien, es sin duda un gran error. La media naranja no existe porque deseamos a alguien que tenga vida propia, que vuele de nuestra mano, pero al que no tengamos que completar. Siempre y cuando desees compartir tu vida en pareja. Porque tú eres bastante y eres suficiente para ti misma. Y por eso, porque somos suficientemente valiosas para nosotras mismas, no necesitamos una pareja que centre nuestra vida. Al fin y al cabo, aunque una pareja sea muy importante y haga que nos sintamos muy felices y plenas, la felicidad debe habitar en nosotros, en nuestro interior y sean cuales sean las circunstancias. Porque si sólo te centras en tu pareja, sufrirás. Sí, porque no todo será de color de rosa todos los días, y porque si esperas mucho de algo, conseguirás decepcionarte una y otra vez, muchas más veces de lo que realmente piensas. Porque la vida en pareja tiene que complementarse, no anularte. Y porque si te centras en una persona, terminarás por anularte a ti misma, desde tus aficiones y las cosas que te gustan hasta lo que sientes.